martes, 16 de septiembre de 2014

#NoAlTorodelaVega

Hoy, 16 de septiembre de 2014, en una época en la que se nos presupone civilizados, un pueblo ha vuelto varios siglos atrás (dejando atrás la Edad Media con creces) y perseguido, lanceado y torturado hasta la muerte a un animal para el disfrute de una panda de cavernícolas que jaleaban el evento y lo defienden calificándolo de "tradición".

Por cruel que este hecho ya de por sí sea, todavía puede empeorar. Y mira que es difícil. Se puede defender lo indefendible alegando como el Ayuntamiento de Tordesillas que "el animal no sufre, es parte de la fiesta, no la víctima. Encontrar la belleza en lugares insospechados, ésa es la clave". Y agarraos que no se detiene ahí: "Las endorfinas y bilirrubina hacen que el toro solo disfrute de la fiesta. Está demostrado científicamente". Olé. Con dos huevos y menos veinticinco de masa cerebral.

No sé de qué me extraño, ya que son bestias, ni razonan ni sienten como nosotros, luego está el pobre toro que tiene que sufrir a estos seres. Seres anclados en el medievo, en una tradición que enorgullece a unos desgraciados y asquea al resto de la humanidad. Por favor, si vamos a elegir la Edad Media como época en la que vivir, vamos a hacerlo con todas las consecuencias. Decapitaciones en la plaza del pueblo al estilo revolución francesa y si miramos unos años atrás, lucha de gladiadores a muerte en los circos. O incluso podemos crear nuevas tradiciones. Por ejemplo, en mi casa es tradición gritar un "OLÉ" muy fuerte cuando un toro cornea a un tipo con traje de luces, os la podemos prestar al resto de la sociedad. Y si esa no os gusta se me ocurra otra genial, lanzar desde el campanario del pueblo a los lanceros de Tordesillas, ¿qué os parece?

"Es que no se puede comparar a las personas con los animales". Han apedreado a una muchacha que se manifestaba contra esta barbarie. Parece ser que ni siquiera tienen suficiente materia gris para distinguir a una muchacha de un morlaco. O es que es hora de asumir ya que son unos sádicos salidos de las entrañas del infierno que se creen con el derecho divino de hacer lo que quieran con la vida del resto de seres que les rodean. Y ese tipo de personas merece sufrir en su propia piel el sufrimiento que ellos infligen al resto. "Respeta mis tradiciones" dicen. ¿Se puede respetar un sacrificio de una persona a un Dios? ¿Una ablación? ¿La quema de mujeres en la hoguera? ¿El esclavismo? Todas fueron tradiciones, pero hay algo que los seres humanos hacen de vez en cuando: EVOLUCIONAR. No puedo respetar a Atapuerc... Tordesillas. No puedo.

No espero que los lanceros entiendan algo, ni siquiera espero razonar con ellos alguna vez (seamos coherentes, no se puede razonar con gente con estiércol por cerebro). Sin embargo, espero que el resto de la sociedad se lo plantee de esta manera: ¿cómo le explicarías esta "tradición" a un niño?

PD: Gracias a Sarita Lastre por plantearme esta duda: ¿en Tordesillas cómo eligen al tonto del pueblo? Porque la competencia es altísima.

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